El portavoz de Prodeni, José Luis Calvo, declaró a Servimedia que este "sucedáneo de 'Gran Hermano'" constituye "una clara exhibición de las intimidades de unos niños, que aparecen con nombres y apellidos, y a los que se coloca en circunstancias anómalas como la de manchar con pintura las paredes de una habitación para provocar la risa del respetable".

Para Prodeni, "no hay ya voto de confianza que valga para este espacio", una vez visto el programa de debut: "La Fiscalía tiene que tomar cartas en el asunto, y el Gobierno debe actuar para que no se siga con esta explotación de los menores en el negocio televisivo".

A esta ONG dedicada a la defensa de la infancia no le vale que los padres hayan dado su visto bueno a la aparición de sus pequeños en pantalla o que el contenido haya sido supervisado por psicólogos. "Lo que se emite es lo que cuenta, incluido la presencia de unos padres que no tienen problema en contar a la audiencia los defectos de sus hijos, que están en una franja de edad tan problemática como la preadolescencia".

"Esto no un 'docu-show', como dicen los responsables del programa, ni es 'Supernany' (espacio de Cuatro), en el que hay unos objetivos educativos", se lamentó Calvo. "Aquí estamos ante el circo y el espectáculo por el espectáculo. A lo mejor, dentro de unos años, estos niños les reprocharán a sus padres que en su entorno les vieran así en la tele".

El primer programa de ayer de "Dejadnos solos" registró un 8,7 de cuota de pantalla y 1.597.000 espectadores.