Según el sindicato, la finalidad del reajuste es "detraer agentes de movilidad en puestos de circulación de gran envergadura", reduciéndolos de dos a uno en muchos de estos puntos, con el consiguiente perjuicio de la fluidez del tráfico y la seguridad.

UGT ve "sospechoso" que esta reubicación se produzca cuando se prevé una mayor recaudación fiscal y cuando, a la vez, se da a los agentes una paga por productividad basada en el número de denuncias y otros criterios recaudatorios, que influirán también en el número de efectivos que se dedican a ello.

Adicionalmente, la Federación de Servicios Públicos de este sindicato recriminó al Ayuntamiento que realice el reajuste "recurriendo sin pestañear al recorte de los derechos laborales de los trabajadores, tales como denegación de días libres, detrimento del derecho a la formación y menoscabo de la conciliación de la vida laboral y familiar".