Lo anunció ella misma en rueda de prensa después de la reunión de la Comisión Ejecutiva del PSOE en la que se aprobó su elección como cabeza de lista en las elecciones al Parlamento Europeo.

Lo que el PSOE pide en esa iniciativa, explicó, no es el voto “contra” ninguna ley, sino que no se ponga a los parlamentarios en la tesitura de votar un texto “claramente lesivo” para la libertad de las mujeres y contrario a un desarrollo “armónico y razonable” del país.

Quieren rechazarlo “antes de que llegue” al Parlamento, “detener” el procedimiento que, en caso de seguir adelante, hará que finalmente llegue un proyecto de ley de reforma de la vigente legislación sobre aborto.

Los parlamentarios del PP, aseguró, tienen “una gran ocasión” para contribuir efectivamente a ese objetivo y detener la marcha de un texto “cuestionado ampliamente” en la sociedad española y también dentro del PP.

Emplazó expresamente a los diputados y las diputadas del PP a demostrar con su voto que están “con la libertad” de las mujeres y no con la reforma propuesta por el ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón.

Los socialistas han pedido voto secreto, mediante papelete, en esa proposición de ley, para facilitar así el voto en conciencia de todos los parlamentarios.