El consejero de Economía y Hacienda, Francisco Catalá, definió los presupuestos como los más “sociales” y “solidarios” que se pueden presentar en tiempos de crisis. Las cuentas recibieron el apoyo de PSOE-PAR, el rechazo de PP y CHA y la abstención de IU, lo que fue suficiente para que salieran adelante.

Catalá fue muy crítico con la portavoz popular Dolores Serrat, a quien acusó de no haberse leído las cuentas, ya que le responsabiliza de incrementar la deuda y de aumentar el gasto corriente, “cuando la realidad ha sido un descenso de 20 millones de euros en ese apartado”. “Miente por vicio, por enfermedad o por necesidad, porque dice que hay un aumento desmedido”, le espetó.

El consejero de Economía y Hacienda resaltó que no hay ningún exceso en este presupuesto en ninguna área de gestión. “Sólo me falta quitarles la bombilla del flexo”, dijo, para concluir preguntándole a Serrat "qué inversiones considera innecesarias, qué guardería no hay que hacer, o qué hay que detraer de pabellones deportivos y de carriles bici".