Cataluña. El Gobierno critica los "vaivenes" de la Generalitat sobre el referéndum
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La vicepresidenta y portavoz del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, criticó este viernes los "vaivenes" de la Generalitat de Cataluña sobre el referéndum que pretende celebrar el 9 de noviembre y recalcó que el procedimiento para abrir un proceso de independencia está "muy bien delimitado" en la Constitución.
Sáenz de Santamaría hizo estas declaraciones en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, en la que compareció junto a los ministros Alberto Ruiz-Gallardón y Luis de Guindos.
Preguntada sobre la propuesta del consejero de Presidencia de la Generalitat, Francesc Homs, de celebrar un referéndum en toda España tras la consulta soberanista en Cataluña, Sáenz de Santamaría recomendó al Gobierno catalán "no someter a los ciudadanos a estos vaivenes". "Oímos muchas cosas y cada día nos plantean una cuestión diferente", criticó.
"Es el señor Homs el que tiene que decir en qué procedimiento está ahora. Él ha plantado la posibilidad de referéndum en toda España y yo lo que le digo es que hay un procedimiento para modificaciones de esta naturaleza que afecta a la soberanía del pueblo español que viene muy bien delimitado", dijo.
La vicepresidenta pidió "respeto a las leyes" a los dirigentes catalanes, dado que "la democracia es fundamentalmente el respeto al imperio de la ley" e insistió en que la Constitución de 1978 "es muy clara" al respecto.
Subrayó que la puesta en marcha de un proceso de independencia de una comunidad autónoma "no puede hacerse por un procedimiento ajeno a la Constitución" porque esa decisión depende del "conjunto de los españoles".
Sáenz de Santamaría manifestó que los límites están "muy bien marcados" y advirtió de que la Generalitat debería explicar a sus ciudadanos las consecuencias de la independencia, porque implicaría que la comunidad saldría del euro y de la Unión Europea.
Fuentes gubernamentales explicaron posteriormente que el problema del referéndum que pretende convocar Artur Mas no es sólo el procedimiento que está utilizando para llevar a cabo una reforma de la Constitución, sino el mero hecho de preguntar a los ciudadanos sobre la independencia.
El Gobierno considera que, más allá del formato y el procedimiento, el escollo legal con el que se encuentra Artur Mas es que no puede consultar sobre esta cuestión a una parte de los ciudadanos, tanto si tiene carácter vinculante como si no.
A su juicio, la Constitución deja bien claro que la soberanía nacional recae sobre todos los españoles y organizar un referéndum en una parte del país iría contra la propia legislación.
(SERVIMEDIA)
07 Feb 2014
PAI/gja