Así lo aseguró este viernes la vicepresidenta y portavoz del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, en la que compareció junto a los ministros Alberto Ruiz-Gallardón y Luis de Guindos.

Sáenz de Santamaría recalcó que el Gobierno "no va a cambiar la política antiterrorista" pese a la petición del lehendakari, que este martes se reunió en el Palacio de la Moncloa con Urkullu.

La vicepresidenta subrayó que la política antiterrorista del Gobierno sigue siendo la misma y a la banda terrorista ETA sólo le queda "disolverse" porque Rajoy no va a abrir ningún proceso de negociación.

Asimismo, Sáenz de Santamaría defendió el derecho de Rajoy a mantener reuniones secretas con otros dirigentes políticos sin que se informe de ellas posteriormente, como esta misma semana ocurrió con Urkullu.

"Dentro de nuestras tareas políticas,tenemos innumerables reuniones buscando el interés general y a veces esas reuniones aconsejan que se hagan en un determinado entorno", dijo.

Sáenz de Santamaría adujo que el Gobierno a veces necesita celebrar reuniones "en un entorno de prudencia", como la de esta semana entre Rajoy y Urkullu, para que los asuntos "puedan fructificar".