Según comunicó la compañía, el contrato comprende el desarrollo de la ingeniería, el suministro, el montaje y la puesta en servicio de la electrificación de las líneas ferroviarias que circulan entre las localidades de Basingstoke–Southampton y Basingstoke–Reading, en el sur del país.

Está previsto que las obras comiencen durante el próximo mes de junio y finalicen en 2019.

El contrato se enmarca dentro del programa nacional de electrificación de Network Rail, el principal gestor de las infraestructuras ferroviarias en Reino Unido.

El proyecto, según explican las compañías, contribuirá al desarrollo económico y social de la región mediante la generación de empleos directos e indirectos, con un compromiso de contratación por parte del consorcio del 80% de personal local. Además, han diseñado un plan de reducción de emisiones de carbono con el objetivo de mitigar el impacto medioambiental.