Aguirre hizo estas declaraciones a su llegada a la Convención Nacional que el Partido Popular celebra este fin de semana en Valladolid, donde coincidió en un pasillo repleto de gente con Mariano Rajoy. Sin embargo, ninguno vio al otro y se cruzaron sin saludarse.

Tras el nacimiento del nuevo partido Vox y la renuncia de Jaime Mayor Oreja a repetir como candidato del PP en las elecciones europeas de mayo, Aguirre sentenció que "la fuerza de identidad de nuestro partido ha sido siempre la integración".

"Es muy importante que a todos aquellos que comparten nuestros principios les tendamos la mano y tengamos mano tendida para que todos vengan hacia el PP", sentenció.

Aguirre adujo que los actuales son "momentos muy delicados y necesitamos a todo el mundo". "Nosotros no estamos aquí para usufructuar el poder, sino para servir a los ciudadanos en base a los principios en los que nosotros creemos, que son la defensa de España y la defensa de la libertad".

La presidenta de los populares madrileños recordó que en el PP socialdemócratas, liberales y democratacristianos "se unieron y acabaron con la hegemonía del felipismo" cuando José María Aznar ganó "por mayoría simple" en 1996 y "por mayoría absoluta" en 2000.

Aguirre insistió en que "España está viviendo un momento muy difícil", de la misma manera que también son "momentos muy difíciles en los que los miembros del PP tenemos una responsabilidad muy especial".

Subrayó que los españoles "han confiado en nosotros" en las últimas elecciones generales y "no en otras fuerzas políticas", en alusión a formaciones nuevas que surgen ahora como Vox o a otras que tratan de robar votos a los populares como Ciudadanos y UPyD.