En su intervención en el Pleno del Congreso de los Diputados, la ministra sostuvo que la decisión del Ejecutivo es “responsable” y por el “bien de todos”, aunque recordó que sólo afecta directamente “a 124.500 personas de los 16 millones de ocupados” que hay en España.

También justificó esta medida en el hecho de que, según sostuvo, “la moderación de la inflación el año que viene está garantizada”.

Así, insistió en que la “moderación salarial es clave para la competitividad del país” y para la creación de empleo, y recordó el acuerdo firmado por los interlocutores sociales en esta materia.

Báñez contestó así al diputado socialista y ex ministro de Trabajo y Asuntos Sociales Jesús Caldera, quien advirtió que la congelación del salario mínimo tendrá “consecuencias devastadoras” para los trabajadores, ya que también afecta a los que perciben sueldos cercanos al mínimo. Además, afirmó que esta medida también será “negativa” para la economía.