Este organismo señaló que durante 2013 hubo 264 ataques marítimos, en los que 202 barcos fueron abordados, 22 recibieron disparos, 12 quedaron secuestrados y otros 28 lograron escapar, en tanto que 300 personas fueron tomadas como rehenes y 21 resultaron heridas.

Se trata de la cifra de ataques más baja desde 2007, cuando se registraron 263. Posteriormente se desató una escalada de piratería marítima global, con 293 barcos atacados en 2008, 406 en 2009 y 445 en 2010, año que figura como máximo histórico en este tipo de actividades, según datos de otros informes de la Oficina Marítima Internacional recogidos por Servimedia.

Además, un total de 1.181 personas fueron tomadas como rehenes en 2010, la cifra más elevada desde que la Oficina Marítima Internacional comenzó a recopilar datos en 1991.

El director de la Oficina Marítima Internacional, Pottengal Mukundan, afirmó que la principal razón que explica la caída de los ataques en el mar en todo el mundo es “la disminución de la piratería somalí frente a las costas de África oriental”.

En este sentido, este organismo apuntó que los piratas somalíes fueron disuadidos por una combinación de factores, como el papel clave de las marinas internacionales, el reforzamiento de las embarcaciones, el uso de equipos de seguridad privados a bordo y “la influencia estabilizadora del Gobierno central de Somalia”.

“Es imprescindible continuar con los esfuerzos internacionales combinados para abordar la piratería en Somalia. Cualquier complacencia en este escenario podría volver a encender la actividad pirata”, advirtió Mukundan.

Según la Oficina Marítima Internacional, los piratas somalíes atacaron 15 barcos el año pasado, de los cuales secuestraron dos y otros ocho fueron tiroteados. Se trata de las cifras más bajas desde 2006, cuando se registraron 10 ataques somalíes. Posteriormente, aumentaron a 237 en 2011 y a 75 en 2012.

Sin embargo, esta institución recalcó que los piratas nigerianos fueron "particularmente violentos", ya que mataron a un tripulante, tomaron como rehenes a 49 y secuestraron a otros 36 a cambio de un rescate. Además, protagonizaron 31 de los 51 ataques en las costas de África occidental.