El Gobierno de España recordó a través de un comunicado que "los asentamientos son ilegales según el Derecho internacional y que constituyen un importante obstáculo para alcanzar un acuerdo de paz definitivo alrededor de la solución de los dos Estados".

Por ello, reiteró "la necesidad de que todas las partes se abstengan de cualquier acto que pueda poner en peligro las negociaciones en curso" para lograr una estabilidad pacífica en la región.

El Ministerio aseguró que las negociaciones actuales entre israelíes y palestinos son "la única vía para terminar con el conflicto" y por ello acogió "con satisfacción" la reciente liberación de 26 presos palestinos por parte de Israel y la reciente propuesta por parte del secretario de Estado de EEUU de que las partes adopten un “acuerdo marco” que establezca parámetros claros para alcanzar una solución duradera y sostenible.