Tráfico. Menos de 1.000 muertos en las carreteras, deseo del Gobierno para 2014
- Un total de 1.128 personas fallecieron el año pasado, un 13,3% menos que en 2012 y el mínimo histórico desde 1960
- En 2012 se dejó atrás por primera vez la barrera del millar de accidentes de tráfico

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Uno de los principales deseos señalados por el Ministerio del Interior para 2014 en materia de seguridad vial es dejar atrás por primera vez en la historia la cifra del millar de personas fallecidas en accidentes de tráfico, una vez que el año pasado se alcanzara este objetivo en el número de siniestros (994).
El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, señaló este viernes, en una rueda de prensa en Madrid, donde presentó el balance de seguridad vial de 2013 acompañado de la directora general de Tráfico, María Seguí, que esto supondría “un hito histórico” y que “todas” las medidas que pone en marcha el Gobierno a través de la Dirección General de Tráfico (DGT) “van encaminadas al objetivo de que cada día haya menos muertos, heridos graves, lesionados y accidentes en las carreteras españolas”.
Fernández Díaz señaló que un total de 1.128 personas fallecieron el año pasado en vías interurbanas en un plazo máximo de 24 horas de producirse el accidente de tráfico, lo que supone 173 muertos menos en comparación con los 1.301 de 2012 (-13,3%).
Se trata del mínimo histórico desde que la DGT comenzara a recopilar estadísticas en 1960, año en el que 1.300 personas perdieron la vida en las carreteras, cuando, según remarcó Fernández Díaz, había un millón de vehículos y dos millones de conductores, frente a los 26 millones de vehículos y 31 millones de conductores de la actualidad.
Además, es el cuarto descenso más acusado toda la historia, tras las reducciones del 20,5% de 2008, del 14,5% de 1995 y del 14,2% de 2011, y el décimo año consecutivo de bajada de la siniestralidad en las carreteras españolas. A pesar de ello, Fernández Díaz recalcó que “siguen siendo 1.128 poderosísimas razones para seguir trabajando por mejorar nuestra seguridad vial y pelear por una carretera sin muerte”.
Como datos generales, Fernández Díaz apuntó que en 2013 hubo 994 accidentes mortales (por 1.177 del año anterior), en los que murieron 1.128 personas (frente a 1.301 de 2012) y otras 5.206 resultaron heridas graves (6.178). “El dato de reducción de heridos graves es muy positivo porque es cercano a las 1.000 víctimas. Vamos en la buena dirección en la política de seguridad vial”, añadió.
El promedio diario de fallecidos en las carreteras ha pasado de los 10,9 de 2003 a los 3,1 de 2013, y Fernández Díaz recordó que “el pico” histórico ocurrió en 1989, cuando murieron 5.940 personas, “una cifra desgarradora” frente al mínimo de 1.128 del año pasado.
“UN MES ENTERO SIN FALLECIDOS”
Por otro lado, indicó que, entre 2005 y 2013, el número de víctimas mortales descendió un 65% y el de movimientos de largo recorrido (con 100 kilómetros o más) disminuyó un 10%, mientras que el parque de vehículos aumentó un 13% y el censo de conductores, un 22%.
Otro dato positivo ofrecido por Fernández Díaz es que en 2012 hubo 19 días sin muertos en las vías interurbanas, por los 29 del año pasado, esto es, “el equivalente a un mes entero sin fallecidos en las carreteras”.
Las carreteras convencionales fueron el escenario del mayor número de personas fallecidas (898), seguidas de las autovías (178) y las autopistas (52), y la salida de la vía ocasionaron uno de cada tres accidentes.
Fernández Díaz subrayó que la mortalidad en las carreteras descendió en todas las edades, salvo en el tramo entre los 65 y los 74 años, ya que 126 personas de esta franja murieron el año pasado, 10 más que en 2012.
Por tipo de vehículo, se apreciaron ligeros aumentos entre los usuarios de motocicletas (188 muertos), autobús (10) y camión (35), así como los peatones (138).
Fernández Díaz incidió en que el porcentaje de personas fallecidas que no llevaban puesto el cinturón de seguridad, el casco (en el caso de ciclomotoristas y motoristas) o la sillita infantil ha ido reduciéndose en los últimos años. “La estimación empírica que se hace desde la DGT es que se habrían salvado alrededor de 80 vidas si usaran el dispositivo de seguridad, con lo que el descenso en 2012, en vez del 13,3%, sería del 19%”, apostilló.
El ministro del Interior señaló que la reducción de la siniestralidad en las carreteras españolas se debe a “la concienciación de los ciudadanos y conductores españoles”, y puso como ejemplo que en los días de Nochevieja, Año Nuevo y 2 de enero no se ha contabilizado ningún fallecido, así como las políticas de seguridad vial puestas en marcha desde las autoridades y “la labor de control de las normas” que desempeñan los agentes de seguridad con competencias en materia de tráfico.
(SERVIMEDIA)
03 Ene 2014
MGR/man