Se trata de la Tarifa de Último Recurso (TUR) a la que están acogidos unos 20 millones de usuarios (domésticos y pymes). Esta tarifa se fijaba casi a partes iguales entre el resultado de la subasta Cesur (45%), que fue invalidada, y el coste de los peajes (55%) que determina el Gobierno.

El precio de la TUR ha quedado en manos del Ejecutivo después de que la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) declarara no válida la subasta del pasado 19 de diciembre que tenía que marcar el coste de la energía que debían abonar los usuarios de la TUR.

Para tomar su decisión, el Gobierno solicitó a la CNMC que hiciera una propuesta sobre el sistema que debía aplicar. El organismo regulador remitió dos propuestas que pasaban por sendos incrementos del 1,4% o del 2,9%.

En su comparecencia para hacer balance anual de la acción del Gobierno, el presidente aclaró que el mecanismo aprobado será sólo aplicable en el primer trimestre de 2014, ya que en las siguientes revisiones se empleará otro mecanismo en el que ya trabaja el Ministerio de Industria, Energía y Turismo.

Rajoy indicó que esta subida del 2,3% en enero se produce porque el Consejo de Ministros aprobó un real decreto por el que se adopta un “mecanismo transitorio de fijación” de precio sólo para el primer trimestre que contempla una subida del 1,4% del coste de la energía.

Por otro lado, el presidente adelantó que Industria ha remitido la orden ministerial que recoge que los costes regulados (los llamados peajes) y que determina el Gobierno se incrementen un 0,9%.

Por ello, tal y como confirmó Rajoy, la Tarifa de Último Recurso se incrementa en enero un 2,3% respecto a la actual que abonan la mayoría de los consumidores en España.

NUEVO SISTEMA

El jefe del Ejecutivo avanzó que este nuevo mecanismo será “transitorio” y sólo aplicable para el primer trimestre y será “sustituido” en el segundo trimestre por un “mecanimo definitivo de subastas en línea con lo sugerido por la CNMC”, en cuyo sistema trabaja ya el Ministerio de Industria.

En paralelo, dijo que el ministro José Manuel Soria trabaja ya en la reforma del mercado eléctrico (conocido como pool) para introducir más competencia.

Rajoy aseguró que resolver los problemas de este sector “no era fácil” pero dijo que ya han resuelto la parte regulada y se ha logrado atajar el déficit.

Por ello, agregó, ahora el objetivo es hacer reformas estructurales para que, al final de la legislatura, el precio de la energía en España sea “homologable al de la inmensa mayoría de los países del entorno”.

Rajoy reconoció que “de los temas más complicados” que ha tenido que abordar, “quizás el más complicado”, es el del sector eléctrico porque acumulaba un déficit de 26.000 millones de euros que hubiera llevado a la “quiebra" del sistema.