Así lo explicaron fuentes sindicales a Servimedia, que indicaron que la empresa está ultimando con la mesa negociadora las condiciones del ERE, aunque la oferta de la compañía pública será de 20 días por año trabajado con un máximo de 12 a 19 mensualidades, aplicable de manera escalonada.

De esta manera, para los trabajadores de 64 años, serán 12 mensualidades; para los de 63, 13; para los de 62, 14,5; para los de 61, 16; para los de 60, 17,5; y para los de 59, 19. Estas indemnizaciones no llegarían al máximo que prevé la normativa, por lo que quedarían exentas de tributación, según señalaron a Servimedia las mismas fuentes.

El acuerdo se firmará previsiblemente entre la compañía y los dos sindicatos mayoritarios, UGT y CCOO, aunque no se descarta que se sumen el Sindicato Ferroviario y el Sindicato de Circulación Ferroviario. Por su parte, CGT se ha levantado de la mesa negociadora, ya que esta central no firma expedientes de regulación.

Las fuentes sindicales consultadas insistieron en que se cerrara este jueves el acuerdo con la compañía para que el ERE pudiera entrar en vigor antes de que el 31 de diciembre se produzca la segregación de Adif, aunque está previsto que los trabajadores puedan acogerse a este acuerdo hasta marzo de 2014.

Según lo recogido en los presupuestos del Estado para 2014, Adif tiene reservada una partida de 12 millones de euros para estas indemnizaciones.

Desde el 1 de enero de 2014, el administrador se dividirá en dos sociedades, con el nacimiento de Adif Alta velocidad. Ese día pasarán a depender de la nueva empresa 236 empleados.

Por su parte, en Renfe sólo han tenido un encuentro informal porque están a la espera de cerrar la mesa negociadora del ERE. En este caso, estiman que se aplicará a unos 350 empleados para lo que cuenta con una partida de hasta 15 millones de euros, según los presupuestos del Estado.

Renfe también se dividirá en 4 sociedades el 1 de enero. A Renfe Viajeros pasarán 8.900 empleados, a Renfe Mercancías 1.700, a Renfe Fabricación y Mantenimiento 3.350, 662 permanecerán en la actual Renfe Operadora y unos pocos se traspasarán a la nueva sociedad de alquiler de material ferroviario.