Preguntado al respecto en la rueda de prensa posterior a la Junta de Gobierno, Núñez admitió que en los últimos días ha habido en Madrid “algún episodio de contaminación más alta” en las tardes y la noches, cuando se acumula el CO2 emitido durante todo el día, y debido a la estabilidad atmosférica que se vive.

En cualquier caso, precisó que no ha hecho falta activar el nivel de alerta y ni siquiera el de aviso a la población, como sí ocurrió en Cataluña, y que el límite fijado por la UE es de 40 microgramos de dióxido de carbono por metro cuadrado de aire, frente a los 33 que registró Madrid. Ahora, culminó, el Ayuntamiento confía en cumplir en diciembre de 2014 con los niveles fijados por Bruselas para todas las ciudades.