López Garrido compareció en rueda de prensa tras recibir el auto del titular del Juzgado de Instrucción número 4 de Madrid, el juez Marcelino Sexmero, en el que declara el archivo de la querella, que le acusaba de delitos de prevaricación y malversación de fondos públicos por las ayudas otorgadas desde su Secretaría a la Fundación Alternativas, de la que fue patrono.

Ahora, dijo, "todas mis energías están concentradas en la Presidencia" de turno de la Unión Europea, que España asume a partir del 1 de enero, por lo que aseguró que no va a gastar "ni un segundo" en pensar sobre este archivo.

Sin embargo, agregó que después del semestre de Presidencia, en julio, estudiará qué hacer y si emprende acciones legales contra el Centro Tomás Moro.

Además, el secretario de Estado destacó los "puntos importantes" que, a su juicio, se recogen en el auto, como el hecho de que, según el juez, "no es incompatible" ser patrono de una fundación y la persona que concede las ayudas.

Por último, López Garrido reconoció que no entendió en su día por qué algunos dirigentes populares, como María Dolores de Cospedal o Esteban González Pons, reclamaban su dimisión cuando saltó este caso, si bien añadió que se queda "con todo el apoyo" manifestado por compañeros y amigos. Los que no le apoyaron "están contados con los dedos de una mano", remarcó.