La portavoz del PSOE en el Congreso de los Diputados, Soraya Rodríguez, juzgó “reprochable, absolutamente falso” que esas cuchillas solo produzcan lesiones leves, como dice el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz.

“No es verdad, causan lesiones muy graves” y por eso fueron retiradas y la valla sustituida por otra que garantizaba la seguridad, explicó, pero también la integridad física de las personas.

Pidió expresamente “que dejen de decir estas cosas” tanto Fernández Díaz, como el presidente del Gobierno sobre el informe que quiere pedir, como la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, a la que afeó que se mantenga “muda” cuando algún asunto “no le gusta”. “Vaya trío”, exclamó.

Explicó que esas cuchillas se retiraron cuando el presidente Rodríguez Zapatero y su vicepresidenta, Teresa Fernández de la Vega, vieron las cuchillas sobre el terreno y sus efectos “devastadores”. Ordenaron su retirada, se encargó otra valla y cuando estuvo lista las retiraron.

“Qué nos reprochan”, se preguntó, si fue el gobierno socialista el que retiró esas cuchillas cuando comprobó sus efectos. Más que discutir sobre el pasado, lo importante ahora “es que las retiren”.

“En vez de decir tantas tonterías”, animó al Gobierno a “bajar” a Melilla, ver la valla con sus propios ojos y, “si tienen alguna dida, que las toquen, a ver qué lesiones se traen”.