Según explicó a Servimedia la propia Rosa María, la reunión, después de la que hace unos días mantuvo la propia Cospedal con su madre, versó sobre las perspectivas respecto al miembro de Nuevas Generaciones del PP Ángel Carromero, que cumple en España en tercer grado la pena de cuatro años que se le impuso en Cuba por el "homicidio imprudente" de Oswaldo.

También reforzaron los lazos tradicionales que han unido al PP con el Movimiento Cristiano de Liberación que fundó el disidente cubano y hablaron de la investigación internacional independiente sobre el supuesto accidente que defiende la familia Payá y que ayer promovió también la Comisión de Asuntos Exteriores del Parlamento Europeo.

Según Rosa María, todos los argumentos que expuso a la dirigente popular fueron "muy bien acogidos" por ésta, que también coincidió en la necesidad de respetar la soberanía del pueblo cubano a través de un plebiscito en el que pueda optar por la convocatoria de las elecciones libres y plurales que el Gobierno de La Habana no permite.

De acuerdo con el testimonio de Payá, Cospedal garantizó que la posición del Gobierno español es apoyar los derechos humanos en Cuba. "Esperamos que empiece a verse de forma evidente en los nuevos pasos que pueda dar el Gobierno español", le emplazó la hija de Oswaldo.