Así lo manifestaron, miembros de Ecoembes, Ecovidrio, Gave, Vermytec y Eggnovo durante su intervención en el primer encuentro informativo del Observatorio, celebrado gracias a la financiación de la Fundación Biodiversidad, dependiente del dependiente del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (Magrama).

Los participantes además, hicieron hincapié en la importancia de la educación y la sensibilización de la población en general y de los niños en particular ya que “actúan como prescriptores en sus hogares”, porque el ciudadano es la “piedra angular” de la cadena del reciclaje y para que sus sistemas funcionen “su implicación y participación es fundamental”.

Así, la directora de comunicación corporativa y relaciones institucionales de Ecovidrio, Cristina Freire, explicó que "a través del reciclaje conseguimos una economía circular”, ha explicado, “ahorrarnos materias primas, evitamos emisiones de CO2 estamos ahorrando agua, energía y recursos. En nuestro caso concreto, un embase de vidrio es 100% reciclable, todas las veces que se quiera y así evitamos seguir extrayendo materias primas de la tierra”.

Por su parte, el director de comunicación corporativa de Ecoembes, Antonio Barrón, recordó que reciclar “sí sirve”, informando de que “desde que iniciamos nuestra actividad hace 15 años, hemos reciclado 12,8 millones de toneladas de envases, lo que equivale 960 estadios de fútbol repletos de envases. Esto ha permitido ahorrar 12,6 millones de toneladas de CO2, 14,5 millones de Mwh, y 343 millones de m3 de agua”.

El gerente de Gave, José Jiménez, también explicó que no reciclar también tiene un coste económico en el sentido de que “a los ayuntamientos, por ejemplo, les cuesta 2,5 euros, limpiar cada litro de aceite que se echa por el desagüe, y cada vivienda media española, es decir, suponiendo que en cada vivienda viven una media de 3,3 personas, genera medio litro de aceite al mes.Así, Vimos en estos datos un nicho de mercado que nos han llevado a iniciar una nueva etapa para llegar al ciudadano, a través de la instalación de contenedores de recogida de aceite doméstico, firmando convenios con las administraciones locales”.

Por su parte, la directora general de Eggnovo, Mª Ángeles Sábada y los otros 17 emprendedores con los que puso en marcha la compañía en octubre de 2012 también vieron un nicho de negocio, en su caso, a partir de dos patentes que les permiten separar la membrana, de la cáscara del huevo, obteniendo dos productos que tienen una clara aplicación en el sector farmacéutico. “Sólo hay otras dos empresas en el mundo que tienen la patente para obtener estos productos, una en China, y otra en EE.UU. El mercado europeo se abre así ante nosotros como un mercado de oportunidades”, declaró.

Asimismo, Antonio Glámiz, director comercial de Vermytec, señaló que desde su departamento de I+D+I crearon, a partir de residuos agrícolas, paneles que funcionan como aislantes térmicos y acústicos. Además, actúan como consultora tecnología ofreciendo soluciones a otras empresas que no saben qué hacer con sus residuos.

Los participantes de este primer encuentro del I Observatorio de Emprendimiento Sostenible y Biodiversidad concluyeron invitando a aquellos que quieran emprender en su sector a trabajar con enfoque colaborativo, a aprovechar la inercia y conocimiento del propio grupo, estudiar detenidamente la legislación y ver en qué punto de la cadena se tiene más posibilidades.

I OBSERVATORIO DE EMPRENDIMIENTO SOSTENIBLE Y BIODIVERSIDAD

Servimedia puso hoy en marcha con el encuentro de hoy el I Observatorio del Emprendimiento Sostenible y la Biodiversidad, gracias a la financiación de la Fundación Biodiversidad, dependiente del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (Magrama)

Se trata de un nuevo espacio informativo, que se compondrá de otros 3 encuentro más, cuya finalidad es acercar a la ciudadanía a los protagonistas del emprendimiento sostenible, sensibilizarla sobre algunos de los principales problemas ambientales a los que nos enfrentamos, y familiarizarla con las distintas estrategias e instrumentos de conservación que implican tanto a los propietarios, como a los usuarios, como la “custodia del territorio “o “los bancos de hábitats”, entre otros.