Iranzo hizo estas declaraciones al ser preguntado por el último informe de la OCDE, que reconoce los beneficios de la reducción de jornada para la creación de empleo, si se combina con moderacón salarial y flexibilización de la jornada laboral.

El economista dijo "no entender" el propósito de esta estrategia, puesto que la única forma de que no aumente el paro es "que no crezcan los costes laborales".

"Este debate es contraproducente es este momento, en el que se está produciendo un aumento espectacular de la competencia internacional y en el que se está empezando a generar empleo en nuestro país", añadió.

El director del IEE recordó que Estados Unidos y Japón, los países desarrolados donde más horas se trabajan, son los que cuentan con un desempleo más reducido. Sin embargo, matizó que no se opone a que la jornada se reduzca en aquellas empresas en las que esto se negocie de forma voluntaria.