Para dar a conocer esto, la AIPS y la Fundación Sueño Vigilia (FSV) han organizado un simposio sobre "Sueño y Sociedad: Sueño y Tráfico", que se ha celebrado hoyen el Aula Magna del Hospital General Universitario Gregorio Marañón y que ha sido declarada de interés sanitario por la Consejería de Sanidad y Servicios Sociales de la Comunidad de Madrid.

En el comité de honor del acto destacan, entre otros, el consejero de Sanidad de la CAM, José Ignacio Echániz; el director general de Tráfico, Carlos Muñoz Repiso; y el gerente del Hospital Gregorio Marañón, Alfredo Macho Fernández.

El presidente de la Fundación Sueño y Vigilia, Antonio Vela Bueno, señaló la mportancia de este acto, ya que "los problemas de somnolencia aumentan el riesgo de padecer accidentes de tráfico, provocan otro muchos y causan miles de muertes al año".

Según explicó el profesor Vela en la presentación del simposio, los jóvenes constituyen el mayor grupo de riesgo de padecer accidentes a causa del sueño, seguidos por los trabajadores nocturnos, los que realizan un gran número de viajes, conducen solos o por "carreteras aburridas".

"La mitad de los conductores adultos reconocen onducir habitualmente con sueño; el 30% de éstos alguna vez ha dado alguna cabezada en el volante y más de un 3% se ha dormido", comentó el profesor Vela Bueno.

EL INSOMNIO

El insomnio consiste en la dificultad para iniciar el sueño, para mantenerlo, o en un despertar final adelantado. La dificultad para iniciar el sueño, se asocia con ansiedad e ideas y rituales obsesivo-compulsivos. El problema en mantenerlo, está vinculado a enfermedades somáticas o factores ambientales (calor, ruido excesivo, et); y el despertar temprano es, con frecuencia, una manifestación de un trastorno depresivo.

Según explicó el profesor Vela Bueno, los trastornos en el sueño no sólo afectan al enfermo, sino que tienen graves repercusiones en su vida familiar, laboral y social.

Un estudio de la ECA (Epidemiological Catchment Area) revela que el 26% de los pacientes que padecen insomnio tienen relaciones íntimas menos satisfactorias; un 39% reconocieron que su productividad en el trabajo había disminuido, y un 21% e los pacientes dijeron tener menos contactos sociales después de que comenzara esta patología.