Pedreño añade que este compromiso “se constata en las decisiones de Mondragón Corporación de mantener y defender el empleo de los casi 2.000 trabajadores que se pueden ver afectados por esta difícil situación marcada por una caída de las ventas y del consumo”.

La diferencia entre un modelo de empresa cooperativo frente a otros modelos empresariales radica, según Cepes, en que ante una situación similar, el modelo cooperativo se preocupa por el futuro de los trabajadores, anteponiendo el futuro de las personas frente a otro tipo de decisiones y es en esta situación donde se constata, se demuestra y se percibe el mayor ejercicio de responsabilidad de las cooperativas hacia las personas.

A través de un comunicado, Cepes, como patronal de la economía social, trasladó su “apoyo y solidaridad a los socios” en esta difícil situación, y anunció que seguirá defendiendo “los principios y valores de este modelo de empresa, enmarcado en la economía social”.