En declaraciones a Servimedia, Ortiz dijo que “es un Nobel oportuno a una organización que lleva mucho tiempo trabajando desde la invisibilidad, haciendo un trabajo poco agradecido y que tiene mucho que ver con la mediación”.

Preguntada si le llama la atención que se haya concedido este premio a la OPAQ, tras el reciente y vivo debate que suscitó el uso de armas químicas sobre la población civil Siria, Ortiz respondió que es un galardón “que está conectado con la actualidad”, contrariamente a anteriores concesiones.

A su juicio, la concesión de este Premio Nobel de la Paz a la OPAQ “lanza un mensaje a la necesidad de la mediación, que es lo que ha hecho esta organización” para intentar “desactivar” la guerra en Siria y la entrada de otras potencias internacionales que sólo podía “empeorar” la situación en dicho país.

Asimismo, señaló que el Premio Nobel de la Paz debería servir para reflexionar sobre “la necesidad de hacer políticas internacionales más allá de los tratados existentes”, que permitan “avanzar hacia otro modo de resolución de los conflictos” que no sea aquella que conlleva una “escalada armamentística”.