Díaz se reunió ayer en Madrid con el secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, al que adelantó que propondrá a Mariano Rajoy un pacto contra la corrupción en su calidad de presidenta autonómica.

Susana Díaz marcaba así distancias con la estrategia federal del Partido Socialista, que se ha negado a suscribir ningún acuerdo con el PP mientras no se aclare la financiación del partido y la actuación de su extesorero Luis Bárcenas.

En los pasillos del Congreso, Alonso reiteró el deseo del PP de suscribir un “pacto nacional por la regeneración democrática y contra la corrupción”, y si el PSOE “se empieza a mover en esa dirección, nosotros daremos pasos en esa dirección”.

A su juicio, ese acuerdo “es imprescindible” porque además de luchar contra comportamientos ilegales “trasladaría un mensaje de confianza a los ciudadanos, rebajaría la desafección ciudadana hacia los políticos y nos vacunará de que los males del pasado continúen en el futuro”.

Aunque Alonso se niega a dar “un puente por roto”, reconoce que el Partido Socialista lo ha dejado en suspenso y que “no se está produciendo diálogo en el Parlamento”.