Así consta en la propuesta de “Declaración de la Conferencia de Presidentes sobre Violencia de Género” que el Gobierno ha preparado para ser bendecida por los distintos responsables de los gobiernos autonómicos reunidos hoy en Madrid.

Tras señalar que la violencia de género “es un problema social y político cuya solución sólo es posible uniendo los esfuerzos de todas las administraciones públicas” el texto recuerda la unanimidad que protagonizó la votación de la Ley Orgánica de Medidas de Protección Integral contra la Violencia de Género y que ha servido para luchar “contra uno de los ataques más flagrantes a los derechos fundamentales de las mujeres”.

Asimismo, recuerda que cinco años después de sacar adelante dicha ley, la misma “posición común e inquebrantable” permitió aprobar, el pasado 17 de noviembre, las Conclusiones y Recomendaciones de la Comisión de Igualdad del Congreso de los Diputados, que versan sobre el desarrollo de la Ley Integral.

Sin embargo, a pesar de la unidad y la firmeza contra la violencia de género, “el problema no ha desaparecido”, dice el texto, en el que se propone que todos los presidentes autonómicos se comprometan a “seguir impulsando todas la medidas encaminadas a la erradicación de la violencia de género, destinando para ello los recursos necesarios”.

El compromiso implica también abordar las consecuencias que la violencia de género tiene en los niños que viven en ese ambiente, hacer que la sociedad sea más activa en el rechazo a los agresores y en el apoyo a las víctimas, fomentar la educación en valores y buscar la complicidad de los medios de comunicación en esta lucha.

SIN FRONTERAS

“La lucha contra la violencia de género no debe tener fronteras”, dice el texto, que aboga por que el Gobierno, en el ejercicio de la Presidencia española de la Unión Europea, proponga al Consejo de la Unión resoluciones que permitan “avanzar en un modelo común europeo de instrumentos y medidas de lucha contra la violencia hacia las mujeres”.

El texto concluye afirmando que con la lucha contra la violencia de género “no sólo se está abordando el presente, sino que es la nueva forma de organizar las relaciones entre mujeres y hombres en el futuro la que está en juego”.