Esta cifra es 1,4 puntos mayor que la establecida por la Encuesta de Población Activa (EPA) del tercer trimestre del año, que situó la tasa de desempleo en el 17,9%.

Con este dato, España sigue siendo el país de la OCDE con una mayor tasa de paro, con 6,5 puntos de diferencia sobre el siguiente (Irlanda, con un 12,8%).

Además, es 2,2 veces superior a la media de los países más desarrollados, donde el desempleo se mantuvo estable en octubre en el 8,8%.

También es más del doble de la media de los países de la Unión Europea (9,3%) y superior en 9,5 puntos a la de los países de la zona euro (9,8%).