Así se acordó en la Cumbre de Alto Nivel sobre la crisis siria clausurada este martes en Ginebra (Suiza), organizada por Acnur para buscar medidas urgentes con las que “mitigar el impacto social y económico de la llegada masiva de refugiados sirios a sus países vecinos”.

Según el Acnur, se estima que 4,25 millones de sirios viven desplazados dentro de su país, y hasta este fin de semana, un total de 2.123.971 personas se habían registrado como refugiadas en otros Estados.

Por ello, Guterres instó a los países asistentes “a poner en marcha programas de reasentamiento más ambiciosos” y a permitir el acceso al asilo a los que lleguen de Siria.

Los Estados miembros del Comité Ejecutivo de Acnur (ExCom) aprobaron, además, una declaración conjunta donde reconocen “el impacto social y económico” de la avalancha de refugiados en Líbano, Jordania, Iraq, Turquía y Egipto; alaban “su generosidad” y destacan la importante inversión realizada para acoger a los refugiados sirios.

También admitieron que la ayuda internacional a estos países ha sido “notoriamente insuficiente en relación a las necesidades” y pidieron un apoyo masivo que les permita “seguir acogiendo a tantos refugiados”.