En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, Sáenz de Santamaría aseguró que la banda etarra “sólo tiene un destino, que es disolverse y desaparecer” y remarcó que la organización criminal “no va a conseguir nada por disolverse que buscara mientras ha estado en su actividad terrorista”.

Aseguró que en los últimos tiempos se han dado “pasos muy importantes” para incidir en la actual debilidad de la banda etarra, algo que dijo ha sido “tarea de todos”.

Sostuvo que este proceso de debilitamiento de la organización terrorista debe atribuirse al trabajo de “la sociedad civil en su conjunto; de las Fuerzas de Seguridad; de los jueces, de los fiscales, jueces; y al apoyo de las víctimas”.

Añadió que la colaboración internacional también ha jugado un papel “muy importante” en combatir a ETA, así como “la visión terrorismo en todos los foros internacionales”.