Los vinos de la denominación de origen Montilla-Moriles y Rías Baixas sellaron así su hermanamiento de la mano de las cofradías del Serenísimo Albariño y Amigos de la Viña con el fin de "promocionar y defender los productos de calidad de las respectivas regiones vinícolas".

El peculiar acto de confraternidad consistió en rellenar y sellar una botella con la mezcla de los dos caldos hermanados, en este caso, el gallego Albariño y el baenense Cancionero.

La enología, gastronomía y cultura se unen así en esta fiesta por los caldos distinguidos de la tierra baenense, que a partir de ahora abre paso a la celebración de la tradicional Fiesta de la Vendimia.

Los actos oficiales estuvieron acompañados por degustaciones de productos típicos de la región andaluza y gallega y veladas amenizadas por grupos musicales.

La cofradía enogastronómica Amigos de la Viña y el Vino de Baena comenzó su andadura hace cuatro años y en su corta trayectoria ya cuenta con importantes lazos de hermandad con cofradías como la de Vinos de Ecuador o la reciente unión con el Serenísimo Albariño.

Este proyecto teje la unión en amistad en torno a los vinos de Baena, pertenecientes a la Denominación de Origen Montilla-Moriles y premiados en diversas ocasiones por su calidad. En la actualidad son 65 hermanos cofrades los que comparten su afán por la difusión de la cultura y el patrimonio vinícola de su tierra.