En una nota de prensa enviada a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), la compañía recuerda que los resultados de 2012 se vieron “fuertemente afectados” por la reestructuración de su inversión en Iberdrola.

En este sentido, subraya que el resultado recurrente, es decir, excluyendo los resultados extraordinarios y la contribución de Abertis e Iberdrola, se situó en 310 millones de euros, lo que supone un 7,5% menos que en el ejercicio anterior.

En cuanto a los ingresos de la compañía, en el primer semestre del año alcanzaron los 19.121 millones de euros, un 1,5% más impulsados por la actividad de ACS fuera de España.

Por áreas geográficas, Asia Pacífico representa el 39% del total de las ventas, América un 34% y Europa un 26%. Dentro de Europa, España supone un 15% del total de la facturación de la compañía.

La cartera total de obras hasta junio ascendía a 69.786 millones de euros con una caída interanual del 4,5% una vez eliminado el efecto de las variaciones de los tipos de cambio.

Por último, la deuda neta del grupo se situó en el segundo trimestre del año en 5.965 millones de euros, un 30,5% menos que en junio de 2012.