En un comunicado, la organización señaló que Unesa había solicitado al Gobierno que no se obligara a las comercializadoras a disponer de teléfonos gratuitos para la atención al cliente porque los usuarios harían un “uso abusivo”.

Facua respondió a través de su portavoz, Rubén Sánchez, que “los abusos los cometen las eléctricas que lanzan ofertas fraudulentas en las que prometen falsos descuentos y dan de alta a los clientes sin que lo hayan solicitado”.

Asimismo, indicó que las compañías de electricidad y gas ocupan la tercera posición en las reclamaciones de los usuarios, por detrás de la banca y las telecomunicaciones, y en el primer semestre de 2013 registraron el 0,8% de las quejas.

También afirmó que los fraudes en las ofertas de electricidad “están a la orden del día” y que la Comisión Nacional de la Energía (CNE) detectó en 2010 cerca de 82.000 cambios de suministro de electricidad o gas sin el consentimiento de los usuarios.