Según informaron la Agencia Tributaria y la Guardia Civil, el tabaco iba oculto en un contenedor de grandes dimensiones tras una pantalla de cajas de mercancía legal que impedía su descubrimiento en una simple inspección de apertura de puertas. El alijo habría tenido un valor en el mercado superior a los 2.200.000 euros.

La operación comenzó el pasado 24 de julio con la llegada del contenedor al puerto de Valencia. Tras una serie de investigaciones preliminares, se otorgó a la mercancía un perfil altamente sospechoso y el 7 de agosto, con la finalidad de identificar a la posible organización contrabandista, se decidió autorizar la salida del puerto de Valencia de este contenedor de grandes dimensiones, cuya carga tenía que ser entregada en la localidad murciana de Fortuna ese mismo día.

En paralelo a la autorización de salida del puerto, se desplegó un dispositivo conjunto de control de Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria y de la Guardia Civil, con el objetivo de averiguar el destino final del contenedor y comprobar si la mercancía que se había declarado en la aduana para su importación, zapatillas, era el verdadero contenido del contenedor o si, como se sospechaba, en su interior lo que transportaba era tabaco de contrabando.

Una vez en destino, y tras dejar pasar un tiempo para asegurarse de que el contenedor no era objeto de vigilancia, los contrabandistas dieron instrucciones al conductor del camión para la descarga en un almacén próximo, donde fueron sorprendidos por efectivos de Vigilancia Aduanera y de la Guardia Civil cuando ya habían comenzado el trasvase del tabaco de contrabando desde el contenedor a otro camión de gran tonelaje de matrícula extranjera, posiblemente para trasladarlo rápidamente fuera de España.

En ese momento se procedió también a la detención sin resistencia de un total de diez presuntos contrabandistas, ocho de ellos de nacionalidad polaca, dos de origen asiático y otros dos españoles. Momentos después se avisó a la autoridad judicial competente y, simultáneamente, se dio traslado también del tabaco incautado para su depósito y custodia en las instalaciones de Altadis de la zona. En total había 465.500 cajetillas de la marca ‘Marlboro’.

La instrucción de diligencias policiales sigue abierta y tanto los detenidos como el vehículo requisado han sido puestos ya a disposición judicial.