Pleno Congreso. Rubalcaba pide a Rajoy que dimita porque se ha quedado “sin autoridad moral”

MADRID
SERVIMEDIA

El secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, pidió este jueves al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, que dimita por haber mentido a los españoles sobre hechos que se están demostrando “ciertos”, como la existencia de la contabilidad B y los sobresueldos en dinero negro, y por haberse quedado “sin autoridad moral”.

En la comparecencia de Rajoy ante el Congreso de los Diputados, celebrada en el Senado por las obras en la Cámara Baja, Rubalcaba mantuvo su tesis de que el presidente ha mentido a los ciudadanos y eso por sí solo le desacredita para seguir ejerciendo su cargo.

Los hechos conocidos son “tozudos”, aseguró, y la disyuntiva no es la que plantea el presidente, o creerle a él o a Bárcenas, sino creer lo que dice el PP o lo que ha hecho, creerse las palabras de Rajoy en el Parlamento o sus mensajes al extesorero.

Rubalcaba juzgó probado que el PP ha recibido “inyecciones de dinero negro con las que competir dopado en procesos electorales” mientras a sus “mecenas nuncas les faltaron contratos” con las administraciones.

En su opinión, esos mensajes del presidente demuestran que la realidad es “como parece” y es “imposible de creer” que Rajoy no sabía nada. “Ya que no respeta al Parlamento, respete al menos la inteligencia de los españoles”, le dijo.

Insistió en que el presidente ha quedado “completamente condicionado” al futuro de Bárcenas, y su permanencia “está haciendo daño a las instituciones” porque la realidad es que se ha quedado “sin autoridad moral” para hacer lo que España necesita.

Se preguntó, en ese sentido, cómo puede pedir a los ciudadanos que no evadan impuestos si su partido lleva más de viente años manejando dinero negro, o cómo pedirá esfuerzos a los pensionistas cuando él mismo ha cobrado sobresueldos no declarados.

Además de lo que tengan que determinar los tribunales por posibles delitos recogidos en el Código Penal, Rubalcaba dijo a Rajoy que hay “delitos contra la democracia que no prescriben”, entre ellos amparar ilegalidades, mentir a los ciudadanos o estar sometido a hipotecas, y por ello la continuidad de Rajoy es “un problema para nuestra democracia”.

Denunció que Rajoy acudió al Parlamento “a intentar salvarse” y a seguir “resistiendo” como pidió a Bárcenas que hiciera, pero esa estrategia, le advirtió, “no es buena cuando resistiendo se hace daño al país que uno gobierna”.

Le acusó de haberse escondido tras “el burladero” de algo “tan dramático” como la situación económica y el desempleo, y le reiteró que no es la comparecencia lo que genera “dudas” entre los ciudadanos y fuera de España, sino la falta de explicaciones y su “actitud numantina”.

Incluso es un “agravante” de la crisis porque no ha actuado como presidente de Gobierno de un país en crisis sino como presidente de un partido que, “por lo que ya sabemos, ha crecido, vivido y ganado elecciones aupado en un sistema de financiación ilegal durante más de veinte años”.

Se remontó al comienzo del caso para recordar que el PP empezó diciendo que todo era falso y con una “operación limpieza” de Dolores de Cospedal que en realidad era “un borrado de huellas” porque “les habían pillado con las manos en la masa”.

En aquel momento, recordó, Bárcenas aún era “un ejemplo de profesionalidad y de buen hacer”. “No le dejaron caer porque no podían”, porque luego se demostró que la contabilidad “real” del PP es “la suma” de la contabilidad A auditada por el Tribunal de Cuentas y la B presentada por Bárcenas en la Audiencia Nacional.

Bárcenas pasó de ser “intachable” a ser “un delicuente”, sentenció Rubalcaba, no cuando alguien empezó a demostrar que no era inocente, ni cuando se demostró que era un evasor fiscal, ni siquiera cuando rompió “una estrecha relación de amistad”, sino cuando rompió “un auténtico código de silencio forjado durante más de veinte años”.

“Sabemos que existe” la contabilidad B, subrayó, porque no cabe imaginarse a Bárcenas inventándola “por lo que pudiera pasar veinte años más tarde” y porque la Policía ha establecido el mecanismo porque se blanqueaba, troceado para no superar el límite legal e ingresado en forma de donaciones que figuraban en A y auditadas por el Tribunal de Cuentas.

Teniendo en cuenta lo que ya ha pasado “y lo que puede pasar”, el PSOE sigue reclamando la dimisión de Rajoy y no renuncia a la presentación de una moción de censura porque considera que la realidad es lo contenido en los mensajes intercambiados con Bárcenas y que el Gobierno no desmintió.

No son mensajes de un presidente con un delincuente sino “de un socio con otro que le puede poner en apuros”, y que se prolongaron incluso después de conocerse las cuentas en Suiza, cuando todos los españoles sabían que el extesorero era un delincuente fiscal pero el presidente le seguía enviando “afectuosos mensajes de ánimo”.

“Curiosa manera de resistir un chantaje”, añadió, la frase de “Luis, nada es fácil, hacemos lo que podemos”. “Claro, y lo que no hacemos es porque no podemos”, denunció. Eso, sentenció, es “fiel reflejo” de lo que los ciudadanos perciben como la realidad de este caso.

(SERVIMEDIA)
01 Ago 2013
CLC