Así lo explicó el consejero delegado de Banco Santander, Javier Marín, durante la presentación de resultados trimestrales de la entidad.

"Nuestro objetivo no es crecer en crédito, es crecer en clientes", precisó Marín, si bien la intención del banco es que a "ningún cliente solvente le falte crédito".

En esta línea, apuntó que sí "nos gustaría crecer en crédito", al tiempo que auguró que el año que viene "puede haber ya un ligero crecimiento en el crédito".

En cuanto a la morosidad, el número dos del banco apuntó que las entradas en mora de las familias están reduciéndose, mientras que las de las empresas se mantienen estables.

No obstante, Marín reconoció que los niveles de morosidad siguen siendo todavía "altos", aunque "esperamos que en los siguientes trimestres se vayan mejorando los ratios de mora".

El nuevo consejero delegado de la entidad apuntó que con la situación macroeconómica actual es difícil hacer previsiones. "Lo razonable es que España en los próximos dos años se encuentre en un ciclo normal de generación de resultados", aseveró.

En relación con las subastas de Catalunya Banc o NCG Banco, Marín insistió en que "vamos a ver las dos, por supuesto" y se tomará una decisión, "pero vamos a ver las dos".

El consejero delegado de Banco Santander destacó que la reestructuración del sector está prácticamente concluida, a falta de la subasta de las dos citadas entidades.

Por otra parte, preguntado por si la reforma energética tendrá algún impacto en las cuentas de la entidad, Marín descartó esta situación, al igual que en el caso de las ayudas a los astilleros. "No esperamos ningún impacto o que sea un impacto muy marginal", sentenció.