"Nos sentimos como si fuéramos una comunidad judía en un Gobierno de tintes complicados", dijo Torres en el XI Encuentro del Sector Eléctrico, organizado en Madrid por Unidad Editorial.

El vicepresidente de este colectivo de productores fotovoltaicos cargó contra los cambios regulatorios, porque suponen una "expropiación absolutamente encubierta" de las inversiones ya realizadas. Aunque reconoció que pueden formar parte del "pecado original" (déficit), aseguró que ahora se les están castigando con "ensañamiento".

A su juicio, la reforma supone una "quiebra" de la seguridad jurídica con la que invirtieron y nos les queda otra opción que la de ir a los tribunales. Respecto a la regulación del autoconsumo energético, Torres aseguró que supone una "prohibición taxativa" que "mata" un yacimiento de empleo.

Por su parte, el presidente de la asociación de productores renovables APPA, José Miguel Villarig, denunció que el sistema eléctrico español tiene "muchos problemas", pero "el principal es la improvisación constante".

Ante la afirmación de que las renovables han provocado el déficit de tarifa por las primas que reciben, Villarig indicó que "el déficit es muy superior al total coste" que perciben. "Nosotros no hemos generado en absoluto ese déficit", comentó.

Desde Protermosolar, el presidente, Luis Crespo, indicó que la reforma supone un "expropiación subrepticia" de las plantas termosolares, porque las nuevas reglas suponen un "cambio radical" del modelo con el que se empezó hace años.

Crespo sostiene que "se están poniendo palos en las ruedas" de las energías renovables con estas reformas y se está andand un "camino irreversible" para el sector.

Por último, Javier Rodríguez, presidente de Acogen (cogeneración), aseguró que la reforma supone un nuevo "cambio estructural" del sector y ello está generando una "incertidumbre enorme" en las grandes compañías que usan la cogeneración a la espera de más detalles.