Para garantizar la conservación y protección de esta especie de orquídea, el Departamento de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente del Gobierno de Aragón contrata desde el año 2000 a tres personas que, en turnos de siete horas y durante todos los días del periodo indicado, controlan las posibles incidencias que podrían afectar a esta población natural de orquídea, considerada en peligro de extinción, dentro del Catálogo de Especies Amenazadas de Aragón, y que cuenta con un plan de recuperación.

Hace trece años, con motivo de un proyecto Life sobre conservación de plantas aragonesas que fue financiado por la Unión Europea, fue cuando comenzó el programa de vigilancia de esta especie vegetal durante la época de floración, para así evitar la recolección y prevenir la visita en aquellas zonas de la población silvestre que pudieran ser más sensibles al tránsito de personas.

Esta acción comenzó tras observarse previamente que la actitud de las personas que conocían su existencia y que se acercaban al enclave botánico era a veces descuidada, dado que pisaban los ejemplares jóvenes, que se compactaba el suelo de la zona e incluso, con cierta frecuencia, se recolectaban ejemplares o se cortaban flores y frutos de esta planta que está estrictamente protegida por la ley.

Los vigilantes contratados por el Departamento de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente del Gobierno de Aragón este año han ayudado e informado a quienes han acudido a la zona durante esta temporada, les han acompañado con cuidado a contemplar los pies más hermosos y accesibles, han hecho encuestas, han recogido datos para informes y estadísticas y también han desarrollado tareas de educación ambiental con los visitantes, a quienes les han indicado pautas de comportamiento y les han entregado folletos divulgativos sobre la conservación de la flora amenazada en Aragón.

Este programa y actividad se mantiene ininterrumpidamente año tras año, y esta temporada de 2013, en un mes y una semana que han durado las labores de vigilancia, se calcula que han sido 1.827 personas las que han pasado a ver, a fotografiar y a conocer la planta, en grupos variados de entre una y 46 personas de distintas nacionalidades, aunque procedentes especialmente de España, Francia y Gran Bretaña.