De estos 218 fallecidos en accidente laboral, 23 menos que en el mismo periodo de 2012, un total de 184 perdieron la vida durante la jornada de trabajo, mientras que los 34 restantes lo hicieron ‘in itinere’, es decir, en los desplazamientos entre el hogar y el trabajo.

En el caso de los accidentes en la jornada de trabajo, el sector servicios fue el que acaparó, con una gran diferencia con el resto de áreas, un mayor número de víctimas mortales, con 109. A continuación se situó la industria, con 31, seguida por la construcción con 25 y, por último, por la agricultura con 19.

En cuanto a la comparación con el año pasado, la mayor reducción se registró en la industria, con una caída del 31,1%. En segundo lugar aparece el sector agrícola, con una disminución del 29,6%; en tercero la construcción, con un 16,7%; y por último los servicios, que ha registrado un incremento del 17,2%.

En total, entre enero y mayo de este año se han registrado 189.605 accidentes con baja, lo que representa un 4,5% menos que en el mismo periodo de 2012. Los registrados en la jornada de trabajo retrocedieron un 5% mientras que los ocurridos en desplazamientos cayeron un 0,9%.

En el caso de los incidentes en la jornada de trabajo, los casos leves se redujeron un 4,9%, mientras que los graves disminuyeron un 14,8%. En cuanto a los accidentes ‘in itinere’, los leves cayeron un 0,6% y los graves un 17,3%.

Por último, el índice de incidencia por cada cien mil trabajadores de los accidentes mortales retrocedió una décima hasta situarse en 0,27.