Según informó hoy la Embajada de Ecuador en España, este nuevo convenio reemplaza al hasta ahora vigente, suscrito en abril de 1960, y se enmarca en el nuevo contexto caracterizado por la presencia de alrededor de medio millón de ecuatorianos que residen actualmente en España.

Este acuerdo constituye la culminación de un amplio proceso de negociación en cuyo articulado se fijan las reglas para prestaciones por maternidad, jubilación, supervivencia, accidentes de trabajo, incapacidad temporal y permanente, enfermedades profesionales y auxilio por defunción.

El convenio establece, asimismo, el principio de la igualdad de trato para los nacionales de una de las partes contratantes y los miembros de su familia, quienes se beneficiarán de la Seguridad Social en el territorio de la otra parte contratante, en las mismas condiciones que sus nacionales.

El documento señala reglas precisas para la acumulación de períodos de seguro en ambos países, a efectos de que puedan brindarse las prestaciones debidas a los ciudadanos de las partes, independientemente del país en el que se encuentren.

Dichas prestaciones, que serán revalorizadas y complementadas periódicamente, no estarán sujetas a reducción, modificación o retención en ninguno de los países.

El nuevo convenio de Seguridad Social hispano beneficiará a los trabajadores y pensionistas que estén, o hayan estado, sujetos a las legislaciones pertinentes de Ecuador y España.