Así consta en el informe completo sobre la tercera revisión de la banca española realizado por una delegación de la Comisión Europea entre el pasado 21 y 31 de mayo.

La Comisión subraya así que España no precisará más de los 41.000 millones de euros ya desembolsados, aunque estaba abierta la posibilidad hasta los citados 100.000 millones de euros.

"No hay ninguna razón que haga prever más desembolsos en el programa", apunta el informe completo hecho público este miércoles.

La Comisión Europea reconoce que los mercados financieros españoles se han estabilizado desde la anterior revisión, mientras que la liquidez del sector bancario "ha mejorado todavía más".

Además, el organismo europeo destaca que el proceso de reestructuración de la banca española continúa su marcha.

La Comisión apunta también que el cumplimiento de los requisitos establecidos por el MOU "es casi completa", aunque la implementación los esfuerzos debe continuar, incluso en los ámbitos de la reforma de la gobernanza de las cajas de ahorros y los cambios en los procedimientos de supervisión en el Banco de España.

Por otra parte, también constatan la aceleración en la caída del préstamo bancario, tanto por el lado de la oferta como por el de la demanda, "difíciles de separar en el entorno de recesión actual".

En este sentido, la Comisión considera necesario el acceso al crédito para las empresas y familias solventes para que la recuperación económica se afiance.

Por otra parte, afirman que la situación económica y presupuestaria de España "sigue siendo un reto".

Así, mientras que se está trabajando en la corrección de los desequilibrios externos e internos, existen todavía riesgo sobre la evolución de la economía. Por ello, recomiendan continuar haciendo esfuerzos en la corrección del déficit excesivo a través de una "mayor" consolidación gradual de las finanzas públicas, así como la aceleración de otras medidas.

La Comisión Europea recuerda que la próxima revisión tendrá lugar el próximo mes de septiembre.