Fernández Díaz dice que sólo se podrá circular a 130 en vías “monitorizadas” que cumplan unas condiciones

-La directora de Tráfico precisa que aumentar la velocidad es un “anhelo”, pero pide antes una “siniestralidad reducida”

MADRID
SERVIMEDIA

El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, dijo hoy que la “hipótesis” con la que trabaja su departamento es que, una vez realizadas las reformas legales oportunas, se podría circular circunstancialmente a 130 kilómetros por hora en autopistas y autovías que tengan “monitorización” y que cumplan una serie de “variables”.

Fernández Díaz se refirió a este asunto en una rueda de prensa en la sede de su ministerio, donde compareció junto a la directora de la DGT, María Seguí, para explicar la campaña de tráfico de verano y presentar una aplicación de móvil que ayudará a los conductores en sus desplazamientos.

Durante esta comparecencia, el ministro fue preguntado sobre a cuántos kilómetros de autopistas y autovías afectará el aumento puntual de la velocidad a 130 kilómetros por hora, algo que Interior ha dicho que está estudiando para carreteras que cumplan una serie de condiciones, como baja siniestralidad, buen estado de la carretera y buena visibilidad.

En una primera contestación, el ministro, tras asegurar que el límite máximo de velocidad en estas vías seguirá siendo 120, señaló que este tope podría aumentarse circunstancialmente a 130 por hora cuando se apruebe la reforma de la Ley de Seguridad Vial que se está tramitando.

“MUY OPTIMISTA”

Añadió que en un “porcentaje importante” de vías se podría circular puntualmente a 130 si se dan las “variables”, debido a que estas carreteras cuentan con la “monitorización” o señalización adecuada. Añadió que hasta un 80% de las vías rápidas tienen la señalización adecuada para, en su caso, subir el máximo de velocidad en 10 kilómetros cuando lo permitan las circunstancias.

Tras las preguntas de los periodistas para aclarar este punto, el titular de Interior dijo que la “hipótesis” con la que trabaja su departamento es que “un 80%” de las autovías y autopistas pueden “monitorizarse” para controlar el aumento temporal de la velocidad si se cumplen “diversas variables”.

A este respecto, Seguí aseguró que hablar de un 80% de las vías rápidas como susceptibles de un aumento temporal de la velocidad a 130 por hora le parecía “muy optimista”. El ministro comentó entonces que “a lo mejor es un 70%” en las vías en las que puede controlarse el incremento temporal de la velocidad.

El responsable de Interior insistió en que “si no hay monitorización posible, no hay posibilidad de incremento de velocidad en su caso”. Asimismo, se refirió a que “el coste que conlleva esa monitorización hace que no se pueda monitorizar todo al mismo tiempo”.

“DAR PASITOS”

Por su parte, Seguí añadió que “no es en absoluto el momento” en el que se pueda cuantificar cuántos kilómetros o porcentaje de vías rápidas son susceptibles de tener un máximo circunstancial de 130 kilómetros por hora. Aseguró que “cualquier información a este respecto sería malinformar a la población”.

La responsable de la DGT añadió que hay unos “criterios” y “cálculos básicos” sobre este eventual aumento a 130 por hora, pero precisó que “no estamos en condiciones ahora de poder cuantificar una cifra, sea la cifra un 80% u otra”.

“Lo que el ministro quería decir”, continuó Seguí, “es que ojalá lleguemos a la circunstancia donde la siniestralidad en esas vías sea cero, donde las condiciones sean perfectas y donde la infraestructura hubiera permitido hacer esas modificaciones”. Concluyó que ese “anhelo” de circular circunstancialmente a 130 por hora en vías rápidas pasa antes por dar “pasitos” y tener una “siniestralidad reducida” en estas carreteras.

(SERVIMEDIA)
26 Jun 2013
NBC