En este sentido, argumentan que "lo que ha distinguido siempre a las cajas de ahorros de los bancos ha sido su Obra Social" y, según apuntan, "ante la situación social que estamos viviendo hay que establecer líneas prioritarias en los fines, como la inclusión y cohesión social, la atención a la dependencia, la cooperación, emergencias o la salud, entre otros".

Asimismo, demandan que el patrimonio de la fundación sea destinado prioritariamente a reducir las "graves" desigualdades que existen en nuestra sociedad, "a favorecer a los colectivos más vulnerables, a aquellos que se encuentran en una situación de desventaja".

Para el Tercer Sector, la actividad de la fundación "debe ser complementaria y no sustitutiva de la responsabilidad pública, facilitadora de la cooperación social entre personas y entidades, que dote de certidumbre al Tercer Sector, que mejore la calidad de los servicios y dignifique a sus profesionales".

Así, solicitan que la actividad y la distribución de las ayudas llevadas a cabo desde la fundación sean realizadas "con criterios técnicos, transparentes y públicos", así como que sus cuentas sean públicas.

Por otra parte, ante la posible modificación de Ley del Fondo 0,7% de Fines Sociales, prevista para el próximo día 27 de junio en el Pleno del Parlamento de Navarra, el Tercer Sector de Acción Social plantea una serie de propuestas a tener en cuenta, a fin de que la situación de la comunidad foral "no esté en desventaja con respecto al Estado".

Por ello, reclaman complementariedad, ya que, según exponen, mientras las entidades del resto del Estado acceden a convocatorias autonómicas y, además, a la estatal del IRPF, en Navarra "se han sustituido las autonómicas por las del IRPF".

También inciden en el destino a través de la concurrencia competitiva, es decir, que no haya un destino a líneas nominativas, ya que, aunque la última modificación de la ley establece que el Fondo 0,7% no es de libre disposición del Gobierno, "sigue sin cumplirse y sigue habiendo asignaciones nominativas".

En cuanto a los presupuestos, indican que el Fondo 0,7% depende sólo de la campaña de la renta y que en el plazo de 1 ó 2 meses ya se conoce cuál es la recaudación, por lo que las convocatorias pueden salir meses antes.

Otra de las demandas que plantean es establecer anualmente las líneas de acción. "Es necesario revisar los grupos de acción y establecerlos anualmente entre Gobierno y entidades sociales, como se hace en el Estado", señalan.

Por último, critican que, mientras en el resto del país cuando una persona marca las dos casillas de la declaración de la renta, correspondientes a la Iglesia y a Fines Sociales, su aportación suma, en Navarra, sin embargo, divide.