En el primer trimestre del año pasado las jornadas perdidas por huelga ascendieron a 93.302, lo que supone 224.412 menos que en los tres primeros meses de este ejercicio.

Por su parte, el número total de huelgas registradas creció un 15,5%, hasta situarse en 269, y el número de participantes en ellas más que se duplicó, pasando de 50.326 en 2012 a 124.906 en el presente año.

El mayor número de jornadas perdidas por huelga se registraron en paros en empresas, con un total de 202.172 (un 195,2% más que en 2012), aunque el mayor crecimiento respecto al año anterior fue en el de las movilizaciones sectoriales, con un incremento del 345,6%, es decir, casi 4,5 veces más hasta 110.592. En este periodo también se registró una huelga general, algo que no ocurrió en 2012, pero que apenas supuso 4.950 jornadas de trabajo perdidas.

En cuanto a la motivación de las huelgas, destaca el incremento de las derivadas del proceso de negociación colectiva, que se multiplicaron por cuatro hasta suponer 119.252. Menor fue el crecimiento de las huelgas relativas a otros asuntos laborales, aunque duplicaron las de 2012 y se situaron en 134.730.

Por último, los paros que están relacionados con motivos no estrictamente laborales supusieron 63.732 jornadas de trabajo perdidas, mientras que en 2012 sólo hubo 431.