El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, dio esta respuesta al ser preguntado en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros sobre la polémica, que se ha visto incrementada por un informe del Colegio de Médicos que asegura que el tratamiento que está recibiendo el terrorista se le podría dar en la cárcel.

Fernández Díaz alegó que fueron los médicos quienes propusieron su puesta en libertad en agosto del año pasado después de analizar el caso y fue el juez de vigilancia penitenciaria quien tomó la decisión después de consultar a los propios oncólogos en el hospital.

El ministro apuntó que su deber es "acatar las decisiones judiciales", aunque recordó que la Fiscalía en su momento recurrió la decisión del juez para que Bolinaga no saliera a la calle.

No obstante, puntualizó que la puesta en libertad fue condicional y con unas medidas estrictas que debe cumplir para no regresar a prisión.

Recordó, en este sentido, que cuando en febrero aparecieron unas imágenes de Bolinaga con declaraciones en las que negaba arrepentirse de sus crímenes el Ministerio del Interior puso en marcha el procedimiento para revisar su libertad pero la Fiscalía consideró que no había opciones para revocarla.