Díez habló de la propuesta hecha por el comité encargado de analizar el futuro del sistema de pensiones a su llegada a la Junta de Portavoces del Congreso donde insistió en que tras conocer las conclusiones de este grupo de trabajo, ahora “nosotros tenemos que hacer un trabajo político, porque ese comité no se puede pronunciar sobre decisiones políticas que no les corresponden”.

Las conclusiones del citado comité incluyen un endurecimiento de las condiciones de acceso a la jubilación que contempla retraso en el retiro obligatorio, mayores aportaciones temporales y mayor periodo de cómputo.

Pero además añade ahora un descuento variable que depende de la esperanza de vida a los 65 años estimada hoy para los jubilados venideros. Este ajuste de las cuantías finales de las prestaciones se ha calculado para los jubilados que lleguen a tal condición desde este año hasta 2051.

Empezaría a tener efecto en 2015, cuando se jubilan quienes hoy tienen 63 años, con un descuento inicial del 0,7% sobre la prestación esperada, y alcanzará su recorte máximo en 2051 para quienes hoy tienen 28 años, con un descuento sobre la pensión esperada con la legislación de hoy de un 19,2%.

Según la portavoz de UPyD, el objetivo de cualquier reforma del sistema debe ser el de lograr que las pensiones “sean sostenibles y dignas. Esa es una ecuación que no se puede separar”, sentenció.

La idea de Díez es garantizar el “interés superior” de lograr un sistema que “con una situación económica mala, buena o mediana responda al derecho de los ciudadanos a cobrar una pensión digna cuando les llegue la edad de jubilación”.

Esto sólo puede hacerse destinando una dotación presupuestaria al fondo de pensiones , como ya hacen otros países europeos y decidir “cuanto de nuestro PIB” se dedica ese fin “es una decisión de los políticos”.

Con este sistema, defendió, “cuando la economía esté bien, se destinará menos de los presupuestos a ese fondo, y cuando vaya mal, las aportaciones se harán vía impuestos”.

Sobre la propuesta del líder socialista, Alfredo Pérez Rubalcaba, de usar el fondo de reserva para garantizar el pago de las pensiones, Díez dijo que se trata de una decisión de “emergencia” que no soluciona el problema de fondo.