La empresa que realiza la limpieza del Hospital Miguel Servet, Limpisa asociada de Aspel, denunció ante el Juzgado de Guardia y la Inspección de Trabajo los graves hechos que se vienen produciendo en el hospital Miguel Servet por parte de los representantes sindicales desde que el pasado 20 de mayo se iniciara la huelga del servicio de limpieza.

En la denuncia se reseñan las presiones que se han venido repitiendo e intensificado en las últimas jornadas sobre el personal que no secunda la huelga y sobre los mandos intermedios, que han recibido mensajes de texto amenazantes en sus teléfonos móviles. Se han denunciado algunas otras presiones, que suponen coacciones, amenazas y ocupaciones ilegales de las oficinas desde donde se gestiona el servicio, acompañada de agresiones físicas y verbales a trabajadores.

Además, desde el comienzo del conflicto, se han registrado en el hospital actos vandálicos, como la obstrucción de vertederos o de inodoros, la inutilización de compactadores, la provocación de inundaciones, entre otras. Todo ello, con el objetivo de entorpecer los servicios mínimos fijados por el Servicio Aragonés de Salud, aunque sea a costa de perjudicar a los usuarios que hacen uso de un servicio tan sensible como el sanitario.

LLAMADA A LA RESPONSABILIDAD

Desde Aspel entendemos que se hace necesaria una llamada a la responsabilidad a los representantes sindicales para evitar que se repitan estos graves sucesos que perjudican directamente a los trabajadores y a los ciudadanos e impiden que la huelga se desarrolle con normalidad. Es necesario que se abandonen las injustificables medidas de presión de carácter personal y se recupere el espíritu negociador para llegar a un acuerdo.

La negociación del convenio está encallada por tres motivos: la consideración del Hospital Miguel Servet como centro único, plantillas mínimas y ultraactividad del convenio. Hay que recordar que los mismos sindicatos convocantes de la huelga han firmado una ultraactividad de doce meses en los convenios de Zaragoza, Teruel y Huesca, mientras que en este convenio solicitan una ultraactividad indefinida, algo totalmente inasumible y que contradice lo firmado en las otras provincias.

Aspel mantiene una actitud abierta en la negociación y confía en que el conflicto se resuelva en una negociación flexible que permita acercar posturas y lamentamos profundamente que las incidencias que se estén produciendo, ajenas completamente a las empresas que prestan el servicio, puedan afectar a los ciudadanos que acuden a los centros sanitarios.