Ampliación

El CSN autoriza al Gobierno a dar un año más a Garoña para decidir su futuro

- Pero recalca que la central debe permaner en “situación de parada”

MADRID
SERVIMEDIA

El Pleno del Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) ha dado el visto bueno a la ampliación por un año del plazo para pedir la prórroga de su vida útil, que concluye el próximo 6 de julio, pero subraya que deberá permaner “situación de parada”.

El CSN ha emitido una “decisión favorable” a la petición que le trasladó el Ministerio de Industria, Energía y Turismo, tras la solicitud de Nuclenor, la propietaria de Garoña. En ella, se solicita un nuevo plazo de un año para poder pedir la prórroga de la actividad en la planta más allá del 6 de julio, que es cuando finaliza el permiso vigente.

Tras tres días de reuniones, el Pleno del CSN acordó esta decisión por tres votos a favor y dos en contra. El Pleno está formado actualmente, tras su reciente renovación, por los consejeros Fernando Martí (presidente), Rosario Velasco (vicepresidenta), Cristina Narbona, Antoni Gurguí y Fernando Castelló.

En su comunicación, el organismo nuclear remarcó que la central debe permanecer en “situación de parada segura y sin combustible en el reactor”.

En esta línea, el CSN sostiene que, “para reforzar, en su caso, la seguridad de la planta”, ha “impuesto la condición de que el titular no pueda introducir combustible en el reactor, sin la autorización previa del CSN”, si se modificase la orden ministerial que autoriza la producción en Garoña, refiriéndose a la Orden Ministerial IET/1453/2012, de 29 de junio.

El CSN sostiene que la decisión adoptada se apoya en los informes técnicos y jurídicos, solicitados para la ocasión así como en el resultado de las evaluaciones realizadas a principios de 2013, como consecuencia de la decisión de Nuclenor de parar la central y almacenar todo el combustible irradiado en su piscina.

En la decisión final adoptada, aseguran que se han tenido en cuenta igualmente las condiciones de seguridad analizadas por los técnicos del Consejo para informar, al Ministerio, de las respecto de las condiciones asociadas a la declaración de cese definitivo de la explotación, dado que esta es la “única situación objeto de trámite administrativo” pedida por el titular de la central “en el momento actual”.

El Consejo aprovecha la revisión de Garoña y advierte que, “para poder realizar una hipotética carga del combustible” se le exigiría una serie de cambios que pasan por las “ modificaciones de diseño requeridas y establecidas en anteriores informes del CSN e instrucciones técnicas complementarias, relacionados con los programas de mejora, relativos al diseño, instalación y puesta en servicio de un nuevo sistema de tratamiento de gases de reserva, las modificaciones sobre el aislamiento de la contención y sus pruebas de fugas, las modificaciones sobre la independencia de los sistemas eléctricos y las modificaciones sobre protección contra incendios.

También que se mantenga el programa de inversiones y modificaciones de diseño asociadas a las mejoras a implantar derivadas de las lecciones aprendidas del accidente de la central nuclear Fukushima Dai-ichi, recogidas en el informe de las pruebas de resistencia e instrucciones técnicas complementarias del CSN.

Y que se efectúe la inspección de la vasija, que permita descartar la aplicabilidad del suceso, acontecido en junio de 2012, de detección de defectos en la vasija de la central nuclear belga de Döel 3.

Esta comunicación del CSN responde a la petición de Industria tras la solicitud de Nuclenor, la propietaria de Garoña. En ella, se solicita un nuevo plazo de un año para poder pedir la prórroga de la actividad en la planta más allá del 6 de julio, que es cuando finaliza el permiso vigente.

Nuclenor, empresa participada a partes iguales por Iberdrola y Endesa, sostiene que está a la espera de un informe de la Dirección General de Tributos sobre la retroactividad de los impuestos del sector energético.

Cuando Nuclenor comunicó su decisión de cese definitivo de la actividad de Garoña en diciembre de 2012, ya indicó que éste quedaba supeditado a dicho informe porque entiende que determinará si es viable o no la continuidad de la planta, tras la entrada en vigor de los nuevos impuestos del sector energético.

En su consulta, Nuclenor cuestionaba a Hacienda si el impuesto sobre la producción de combustible nuclear gastado y residuos radiactivos tiene o no carácter retroactivo.

Fuentes empresariales consultadas apuntaron que esta solicitud de prórroga no altera la decisión de cese de actividad pero que, de no pedirla, Garoña estaría en una "situación irreversible" si el informe sale después del 6 de julio. Se trata de un "paso adelante para intentar salvar Garoña ", sostienen de la empresa propietaria.

(SERVIMEDIA)
24 Mayo 2013
MML