En una rueda de prensa celebrada en la Cámara Baja este jueves por la tarde, Nuet se refirió a la reunión que el secretario de Estado de Relaciones con las Cortes, José Luis Ayllón, tuvo este jueves por la mañana con los grupos parlamentarios del Congreso para avanzar en la redacción de una futura Ley de Transparencia.

“Mi gozo en un pozo. Ha sido una reunión decepcionante, donde prácticamente el Gobierno ha venido con las manos vacías”, dijo Nuet, para quien el Gobierno fue hoy a la Cámara Baja “para atar un calendario”.

Tras explicar las fechas que se han fijado para la presentación de las enmiendas a la totalidad, el posterior debate de las mismas y el plazo para las que corresponden al articulado de la ley (21 y 30 de mayo y 11 de junio, respectivamente), Nuet apuntó que lo que no está claro es “dónde” se celebraría el Pleno para el debate de estas últimas, en caso de posponerse al mes de julio.

En este sentido, explicó que en julio el Congreso de los Diputados estará en obras. “Se nos ha explicado es el Senado o incluso algún teatro de Madrid, donde se reuniesen los diputados e hiciesen ese Pleno”, dijo.

Por otra parte, Nuet señaló que “prácticamente la mayoría de temas polémicos sobre la cual distintos grupos parlamentario nos habíamos posicionado” o han tenido la negativa del Gobierno o el Ejecutivo no ha desvelado su concreción.

“El Gobierno tenía prevista la ley hace ocho meses para ser una ley propagandística del Gobierno del Partido Popular, para poder decir que el Gobierno ha hecho una Ley de Transparencia, pero se ha encontrado en estos 8 meses con un debate ciudadano de alta exigencia y evidentemente el Gobierno no está a la altura de ese debate ciudadano”, dijo.

ENMIENDA DE TOTALIDAD

Tras anunciar que su grupo parlamentario presentará una enmienda a la totalidad a este proyecto de ley, Nuet hizo hincapié en la importancia del debate que tendrá lugar en el Congreso de los Diputados el próximo 30 de mayo.

“A través del termómetro de la Ley de Transparencia le vamos a tomar la temperatura al Gobierno, por un lado, y a la calle, por otro, porque si hay alguna ley que podía y debía ser un cordón umbilical entre nuestro Gobierno y las instituciones y el ambiente de la calle de nuestro país esa ley esa la Ley de Transparencia”, dijo.

Vaticinó que la Ley de Transparencia “va a desilusionar a amplios sectores que esperaban que al menos con la ley hubiese un giro, un gesto, una voluntad expresada de forma legislativa de que las cosas pueden cambiar, de que podemos tener una mejor democracia, más transparencia, menos corrupción y un mejor acceso a los temas públicos”.

En cuanto a la Casa Real, Nuet admitió que “va a dar un paso adelante” pero dijo que “ni muchísimo menos es el que muchísimos ciudadanos de este país están pidiendo”, que es una plena transparencia. “No vamos a hablar del Rey, vamos a hablar de la Casa Real. El concepto ya es distinto a la hora de enfocarlo”, añadió.