Aunque el resultado haya sido decretado como oficial, Nicolás Maduro haya sido proclamado presidente y así haya sido reconocido por múltiples gobiernos, el PSOE considera "evidente" que persiste "una crisis política a la que hay que dar una salida".

Para ello, cree esencial "que todas las partes actúen con prudencia en sus actos y declaraciones, traten de rebajar la tensión, y apuesten por el diálogo para evitar una deriva hacia una situación de mayor violencia".

Valenciano subraya que el sistema de votación de Venezuela "está reconocido internacionalmente como uno de los más fiables y cuenta con múltiples garantías", y si hay reclamaciones deben ser atendidas y resueltas "con transparencia" de acuerdo a la legislación.

Las elecciones han demostrado, en opinión del PSOE, que la sociedad venezolana está "muy dividida" entre sus opciones políticas, "como en muchos otros países del mundo, pero eso no significa que también deba estar abiertamente enfrentada".

Los socialistas abogan por "trabajar en favor de la concordia" y piden al próximo gobierno de Venezuela que cuente con el conjunto de la sociedad para afrontar los retos sociales, políticos y económicos del país".