En una entrevista en TVE recogida por Servimedia, reconoció que el PSOE “no es monárquico. Somos esencialmente republicanos”, pero en la transición apostó por una fórmula consensuada que ha prorporcionado “una etapa de estabilidad extraordinariamente importante”.

Cree por ello “comprensible” el debate interno en el PSOE sobre la institución de la Monarquía, e incluso que Juventudes Socialistas reclame abiertamente la apertura de un debate sobre el modelo de Jefatura del Estado.

Sin embargo, cree que no es momento de abrirlo, “que es un tema que deberíamos dejar como está”, y aseguró que, si en la Conferencia Política hay una propuesta formal para abordar ese asunto, él apostará por mantener el actual modelo.

Se mostró también partidario de mantener la fórmula constitucional de inviolabilidad del Rey, y de seguir dejando en sus manos la decisión de abdicar. Es algo que corresponde al jefe del Estado, aseguró, “y creo que debe seguir siendo así”.

Aseguró, en ese sentido, que el Rey ha demostrado desde el comienzo “responsabilidad, sensibilidad social, inteligencia política, mesura”, y que esas cualidades “que le han adornado, y que le siguen adornando, merecen una confianza” por parte de los ciudadanos.

Junto a todo ello, apostó por la entrada de la Casa Real en el ámbito de la Ley de Transparencia, gracias a la cual los ciudadanos tienen que saber “dónde va cada euro que pagan con sus impuestos”.

Igual que los miembros del Gobierno y los parlamentarios presentan su declaración de bienes y patromonio, cree que el Rey también “debería hacerlo”, aunque nada dijo de los demás miembros de la Familia Real.