Según Vivo Sano, el documento alerta de que el consumo de esta sustancia química, presente, entre otros lugares, en el interior de muchas latas de conserva y de refrescos, puede afectar a la salud, especialmente si la exposición es en las primeras etapas de la vida o el desarrollo fetal.

La Fundación Vivo Sano puso en marcha el pasado mes de febrero una iniciativa dirigida a todos los partidos políticos para concienciarles sobre la importancia de reducir la exposición a este compuesto.

El bisfenol A es una sustancia química que permite que los plásticos se moldeen mejor. Está presente, entre otros sitios, en la película interior de las latas de conserva que separa el metal del alimento, dentro de las latas de refresco, en algunas botellas de plástico y en los tupper.

Este elemento es uno de los disruptores endocrinos que más investigación tiene detrás. Según la fundación, más de 27.000 ensayos aseguran que estas sustancias químicas alteran el funcionamiento hormonal del organismo y elevan el riesgo de padecer futuros tumores de mama, próstata y enfermedades como infertilidad, diabetes u obesidad.

El informe de la sanidad francesa apunta a un incremento del riesgo de que aparezcan tumores en la glándula mamaria del bebé, por el aumento de estructuras epiteliales indiferenciadas. Además, sostiene que en mujeres embarazadas, la comida es responsable del 84% de la exposición interna a bisfenol A, fundamentalmente por las latas de conserva.

Nadia Bennich, responsable de campañas internacionales de la Fundación Vivo Sano, señaló que "es muy posible que el actual incremento de los casos de cáncer de mama y de infertilidad esté directamente relacionado con la exposición a bisfenol A antes de nacer y durante la infancia".